jueves, 16 de abril de 2015

Recuerdos de la Copa América (I): Brasil 0 Chile 4 – Copa América Argentina 1987.

Dado que Chile es país que albergara esta edición de la Copa América, el torneo de selecciones más antiguo del mundo, es justo que se comience esta sección donde recordaremos los grandes momentos de la historia del torneo, con un gran momento para la “Roja” como fue su victoria por 4-0 ante la “verdeamarelha” en la Copa América disputada en 1987, con una gran exhibición tanto de Roberto Rojas, como de la capacidad contragolpeadora chilena.

Ese día 3 de Julio de 1987, quedo definitivamente grabado en letras de oro para el fútbol andino, y eso que a priori las opciones chilenas no eran los mejores, puesto que a Brasil le valía el empate para ser primera de grupo y avanzar a semifinales, tras haber obtenido una mejor diferencia de goles que Chile en el partido contra el otro rival del grupo, Venezuela. Además el ambiente dentro del seno de los dirigidos por Orlando Aravena no era el mejor posible, recordemos el revuelo político que recorría Chile en aquellos tiempos donde el país estaba sometido a los dictados de Augusto Pinochet, además de todo el revuelo externo al plantel había fuertes peleas con los dirigentes porque no se terminaban de arreglar los premios que debía recibir la nomina de convocados. Aun así el conjunto andino consiguió abstraerse de todo y manteniendo un perfil bajo ante el coloso brasileño, consiguió sacarle del torneo, solo el técnico, Orlando Aravena se salió un tanto del guión como recuerda el dos veces goleador de aquella noche Juan Carlos Letelier: “Le vamos a ganar cuatro a cero a Brasil”.

Foto: mundod.lavoz.com.ar
El juego comenzó como se esperaba, con una Brasil que salió decididamente a buscar la victoria, acorralando a una Chile, en la que solo Roberto Rojas estuvo a la altura del envite, frenando cada ataque brasileño con intervenciones prodigiosas, especialmente una que realizo a tiro de Muller, tras una gran jugada del conjunto dirigido por Carlos Alberto Silva. En pleno dominio de Brasil, sorprendentemente llego el tanto chileno tras un remate de Basay, apareciendo en el segundo palo, a la salida de una falta botada por Jorge Contreras, cambiando el guión del partido completamente, puesto que el tanto puso en relieve la personalidad chilena, como sobre todo la fragilidad anímica del conjunto brasileño, aun aturdido por la eliminación mundialista a manos de Francia un año antes, que se encontró a renglón seguido con el segundo tanto tras un grosero error de Geraldao, que aprovecho Letelier para batir a Carlos con una bonita vaselina.

Letelier celebra el segundo gol del partido
A partir de ahí Chile domino completamente, haciendo pesar primero el buen pie de sus centrocampistas y después la superioridad numérica que se produjo tras la expulsión del lateral brasileño Nelsinho, aun así Brasil todavía soltó algún zarpazo de muy alta calidad, como una espectacular volea de Rai que se estrello en el horizontal de la portería del “Cóndor” Rojas. Finalmente lo inevitable acabo produciéndose y acabaron llegando dos goles mas por parte de Chile, de Basay y Letelier respectivamente, que dejaron a Brasil fuera del torneo y muy golpeada anímicamente, tanto que acabo produciéndose un cambio de entrenador mientras que el conjunto de Orlando Aravena consiguió llegar a la final, perdiéndola por 1-0 ante Uruguay en el estadio Monumental de Núñez, en un partido chato y de baja calidad, decidido con un gol de Bengoechea tras un rebote concedido por Rojas a disparo de Perdomo.